Enriqueta Martí, más conocida como La Vampira de Barcelona, fue detenida gracias a una vecina. La mujer en cuestión alertó a un amigo suyo municipal que había visto un comportamiento extraño en su vecina de enfrente, al parecer, por la mañana Enriqueta vestía con ropa sucia e iba desaliñada, pero por la noche, cuando pensaba que nadie la veía, salía vestida lujosamente con sus mejores trajes. Pero no fue esto lo que más le llamó la atención a la vecina, sino que la noche anterior de ser detenida, a la vecina le pareció ver el rostro de una niña pequeña haciendo gestos detrás de la ventana del piso de Enriqueta. Así pues, alertó a su amigo y se excusó de no haber contado nada antes porqué no quería culpar a una persona sin tener la más mínima prueba.
El municipal alertó a sus compañeros que llevaban el caso y con la escusa de hacer una inspección de sanidad se adentraron en aquella casa. El panorama fue aterrador, se encontraron huesos humanos y restos de sangre aún en el cuchillo. También había pomadas, ungüentos, cremas hechas con sangre y preparadas para vender. Por suerte, se encontraron con vida dos niñas, que fueron rescatadas. Además, se encontró una lista hecha pedazos con nombres de personas influyentes en la Barcelona de la época. Pero no solo fue en esa propiedad donde se hallaron estas monstruosidades. La policía comprobó que Enriqueta Martí tenía una casa en la calle Jocs Florals, número 55 y fue allí en busca de pruebas. El panorama también fue devastador, allí se encontraron con restos humanos de niños pequeños, un cráneo y un zapato.
Enriqueta se derrumbó en medio de una gran ansiedad. Fue encarcelada en la prisión “Reina Amàlia”, en espera de juicio. Durante el tiempo que estuvo en espera de ser juzgada se intentó suicidarse cortándose las venas con un cuchillo de madera, por lo que se tomaron medidas para que nunca se quedase sola –ya que la gente de la calle quería que fuera juzgada y se le aplicara el garrote vil-.
Aun así, nunca se llegó a celebrar el juicio. Un año y tres meses después de su ingreso en prisión, la madrugada del 12 de mayo de 1913, murió. Algunas teorías apuntan que pudo ser envenenada en prisión. Otras teorías, que las mismas compañeras de prisión la asesinaron, se cebaron con su cuerpo, apaleando y quebrando sus miembros. Lo único cierto es que su muerte impidió que se supiera toda la verdad.
La policía también detuvo a dos hombres, presuntamente implicados en la trama – posiblemente pertenecían a una banda que se dedicaba a preparar pócimas con los niños secuestrados-, el marido de Enriqueta Martí, Juan Pújalo, y el supuesto amante de Enriqueta, Pablo Sociats.
Enriqueta Martí, más conocida como La Vampira de Barcelona o La Vampira del Carrer Ponent, fue enterrada en una fosa común del Cementerio del Sudoeste, situado en la montaña de Montjuïc de Barcelona.
El programa Cuarto Milenio, de Iker Jiménez, analizó el caso de Enriqueta Martí. Aquí podeís ver un trozo del vídeo dónde se recrea y se explica la historia. ¿Qué os parece?
3 comentarios:
Buf, ja us ho vaig dir... el més dur de tots! :S
¡¡Qué miedo!!
Laura S. sí, creiem que és un dels més durs fets fins ara pels següents motius:perquè ens toca molt de prop a nivell de localitat i perquè hi ha nens implicats.
Chic and Chef! Gracias chicas, vuestro blog está genial, ya nos hemos apuntado varias recetas :)
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